martes, 13 de marzo de 2012

¡No estás loca! ¡No lo estás!  ¿Lo oyes?
Es sólo una palpitación, solo eso. El corazón no se te va a parar... No te pasa nada... No te va a pasar nada...Respira, solo, respira. Intenta coger más aire...Es solo cuestión de un rato, enseguida se pasa... Camina. ¡Eso! Anda un poco. Mejora ¿verdad?
¡No!
Sigue ahí, ¿eh?. Te ahogas. Te moriras de ahogo...y, bueno, a todos les va a dar igual. Si nadie va llorar, total ¿y qué has hecho?
¡Mírate! Y te sigues creyendo, ¡sigue!
Mira alrededor, tú sólo mira. Es rídículo, todo eso que haces, simplemente ridículo... Si se rien, si no te toman en cuenta es con razón.
Espera...Un cigarro, sí, un cigarro. "Si no me mata el tabaco, nada lo hará." Bueno, bueno, caladas cortas. Respira ahora. Inhála el humo, en eso consiste.
Otro.
Y ahora vístete.
No. No. No. Esto no. ¿Qué quieres? Comiendo así no pensarías entrar por ahí... Ah, y ahora te quejas ¿no? ¿Vas a llorar? ¿Tú? Tan fuerte ¿eh? Sí valiente, sí. Ya estás llorando. Te puede, esta maldita ansiedad te puede; te ha ganado la batalla. Te tiene para ella.
No importa lo que hagas, te ahogaras, no sabes ni respirar. Corre lo que quieras, escapa. Estira la cuerda. El otro extremo seguirá atado....