martes, 25 de mayo de 2010

Mirando mi trocito

Vuelvo a estar aquí. Apoyada en tu hombro. Y sólo yo sé que es el único lugar del mundo mío, y no quiero que se entere nadie. Así que sigo en silencio, casi no me muevo, casi no respiro.
Desde aquí solo veo una cosa, tus labios, rosados, algo fuertes. Ni siquiera los veo enteros, solo la delgada curva que dibuja el de arriba y mi trocito. (Mmmmm mío).
Creo que es de día, que hace sol, no hay nubes, pero no lo sé. Solo tengo tus labios.
Y a veces cierro los ojos, y siguen ahí.
Los abro, y ahí.
Los cierro.
Abro solo uno; estoy jugando.
Es divertido saber que no van a salir corriendo, que son para mí, y guardar ese pensamiento. Dejar recorrer mi espalda por un escalofrío.

Dia 0 - ¿Dónde está?

Hace tiempo concocí un príncipe ( lo era, lo sé porque sus ojos brillaban más), pero se marchó y ahora no sé dónde está. Quizá fue su caballo el que, despistado, se perdió, o él, quien se alejó entre otras flores.


Pero no está.


Y le busco -a él, a mi- y ojalá la búsqueda duré eternamente... porque se llevo algo mio y me dió motivos...


"There once was a little girl who never knew love
until a boy broke her heart"




(Tchss, tchss...Es casí un secreto pero,... ha vuelto, a veces, aunque nunca es quién dice ser.
Y lo hace sólo para dejarme sola, otra vez. Y que le eche de menos.
Otra vez.)